Desde que somos pequeños, cuando preguntamos con la curiosidad ávida de los niños, ¿Por qué los árboles tienen hojas verdes?, ¿Por qué las aves vuelan?, ¿Por qué un hombre joven llega a ser un día un viejo? se nos responde: "Porque así lo ha dispuesto la madre naturaleza" y por el momento con eso basta, aunque la mayoría aún llegando a la madurez, siguen pensando que efectivamente esa es la última y mejor respuesta, pero ¿De verdad tiene sentido esa conclusión? algo que está en todos los seres vivos y aún en lo puramente material que es capaz de moldear montañas, océanos y continentes y mantener a una galaxia en un movimiento gravitacional armonioso, es decir, que esta "naturaleza" está omnipresente en todo lo que existe.
Sí, creo que no se necesita demasiada reflexión para entenderlo y aceptarlo, pero entonces ¿Qué es en sí esa "madre naturaleza"? ¿Es una señora amable y gorda que se preocupa de que todo funcione? o ¿Habría que decir que la naturaleza está en todo el universo haciendo de éste un "ser vivo" para explicar su comportamiento? lo cual nos haría caer en el panteísmo, que se contrapone con la libertad individual y con el concepto de persona cuando experimentamos que somos "alguien" distinto del mundo.
Pero entonces ... ¿Qué es la naturaleza? Si no es una cosa, ni la totalidad de las cosas ¿qué es esa sabiduría que hace que las aves en un determinado momento construyan un nido y den calor a sus huevecillos para perpetuar su especie? ¿por qué el día y la noche y la vida misma guarda un modo de sincronización con este fenómeno?
Reflexionemos cómo todas las cosas parecen ser llevadas en una dirección siempre con una finalidad. Recordemos este axioma; "Todo orden supone inteligencia", pero las cosas entonces ¿por qué también participan de ésto? si las cosas son contingentes, es decir, no estaban, son y pasarán.
Entendamos, no hay otra respuesta, lo que siempre hemos llamado "la madre naturaleza" es la Voluntad de Dios que creó todo, lo sostiene y lo dirige.
¡Qué fácil es entonces ver, después de lo anterior, Su Omniciencia, Omnipresencia y Sabiduría! porque además, hoy esa revelada identidad de la naturaleza, contiene la belleza, que es el "rastro" que Dios deja en Sus Obras.
Así pues, lo que llamamos "las leyes de la naturaleza" son la manera peculiar y concreta cómo Dios dirige Su Creación, cómo quiere que este universo, del cual formamos parte, se comporte.
NOTA.- Damos en el presente artículo supuesta la realidad de Dios, pues ésta, está suficientemente probada en la conjugación de ciencia y filosofía.
Para abundar en este tema, sugerimos la lectura del libro "¿Fué el universo verdaderamente creado por Dios?" encontrarás el enlace al libro en la parte superior de este Blog, haciendo "click" en el botón "LIBROS".
Alfonso Casttillo G.
Profesor de Filosofía de la Ciencia.
31 de Julio del año 2020.
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